Insuperable. En un sólo texto un ginecólogo ha conseguido sintetizar a la perfección el pensamiento profundamente misógino que ha marcado la obstetricia. En resumen lo que viene a decir es algo así como que «el creador del mundo» sólo hizo una chapuza: el cuerpo de la mujer, que no sirve para el parto. Pero no tenemos que preocuparnos, según el autor, porque gracias a la inteligencia que dió al hombre éste sería capaz de resolver el problema.
Imperfectas parturientas, estad tranquilas. El ingeniero biológico ha llegado a resolver vuestros problemas…
Reír por no llorar…
Ilustración: Birthing yoni de Dana Leggett (con permiso de la autora)